La eterna primavera
Una eterna primavera de días soleados y cielos azules.
Su ubicación geográfica, cerca del trópico de Cáncer y de la costa africana, les otorga un clima muy estable con una temperatura media anual de 22 grados. En general no hay cambios drásticos de temperatura, que suele variar unos 6 grados entre las diferentes estaciones del año y sus playas invitan al baño prácticamente todos los días del año. Este fenómeno se debe a los refrescantes vientos alisios, la corriente marina de El Golfo que baña sus costas y el anticiclón de las Azores. Como ejemplo, solo la isla de Tenerife tiene cerca de 200 microclimas.
Curiosamente podemos encontrar desde largas extensiones de arena/dunas que simulan pequeños desiertos en Fuerteventura y Gran Canaria hasta nieve en invierno en Tenerife, pasando por espectaculares bosques, como el del Parque Nacional de Garajonay en la Gomera.
Todo ello hace que Canarias pueda presumir de una oferta turística que permite combinar una estancia tranquila y saludable con la familia, disfrutando de hacer senderismo o turismo rural, con unas vacaciones más activas en las que practicar deportes como el windsurf, kitesurf, la escalada, la vela o el submarinismo.